David Dutton (Timothy Olyphant) es el sheriff de un pequeño pueblo idílico americano donde todo el crimen es algo inexistente. Pero una tarde un ciudadano de esta comunidad perfecta, conocida como Ogden Marsh, se acerca a ver el juego de béisbol en el colegio con un fusil cargado un hombre y con la intención de ocasionar víctimas fatales, pero el sheriff le dispara, evitando las penas. Al cabo de un rato otro ciudadano, Billy (Brett Rickaby), de los honorables ciudadanos incendia su propia casa pero no sin antes encerrar dentro y bajo llave a su esposa e hijo. Después, en la mañana, unos cazadores encontraron un cuerpo en un pantáno, por lo que tuvieron que llamar al sheriff.
Este dijo que seguiría investigando. Fue a hablar con un ciudadano que creyó haber visto un avión caer hace días, este, junto con David y Rusell subieron a un bote para buscar el avión en el pantáno, y lo encontraron, sin saber que contenía. Mientras, en la cárcel, Rusell ve que Billy está muerto, pero cuando va a abrir la celda David aparece y le dice que si está muerto, no le importaría esperar en la celda, de pronto, Billy se levanta rápidamente e intenta atacar a David y a Rusell, pero no puede, pues está en la celda. Después, mientras David camina por la calle, siente una sensación extraña, y ve en una cremería los cadáveres de personas en bolsas, pero cuando abre una, descubre que un hombre está vivo, y entonces alguien lo ataca con una sierra eléctrica, pero David lo mata. David y Rusell van rápidamente con el alcalde a avisarle que debe cerrar el agua, el alcalde se niega a hacerlo, pero de todas maneras, David y Rusell la cierran.
En la noche, el ejército viene al pueblo y los evacua a todos menos a los que están "infectados". Rápidamente el pueblo se transforma en un asilo de dementes: lo que había sido un lugar donde reinaba una imperturbable tranquilidad, es ahora un sitio asediado por matones sanguinarios escondidos en las penumbras armados con fusiles y cuchillos. El sheriff Dutton se esfuerza por encontrar una explicación para esta avanzada alarmante de actos violentos. Inexplicablemente contaminados, los ciudadanos de Ogden Marsh empiezan a transformarse en criaturas alocadas y violentas. Reina la anarquía y la población continúa siendo atacada por una toxina aún sin identificar y que provoca la locura en sus víctimas. En un esfuerzo por contener la locura, el gobierno toma medidas físicas cerrando todo acceso al pueblo e impidiendo la salida de todos, incluidos los no infectados. Aquellos que tienen la suerte de no estar infectados deben sin embargo permanecer en este lugar peligroso. Entre ellos están el sheriff Dutton, su esposa embarazada Judy (Radha Mitchell), Becca (Danielle Panabaker) un empleado del centro médico y Russel (Joe Anderson), ayudante y mano derecha de Dutton. Este pequeño grupo tendrá que ingeniárselas para permanecer fuera de peligro cuando una noche ordinaria se convierte en una lucha por escapar con vida de lo que había sido hasta hace poco un somnoliento pueblo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario